COMPOSICIÓN COREOGRÁFICA 2-3

A partir de acá, vas a empezar a ver cómo convierto el caos creativo en estrategia. Esta forma de estructurar la creación coreográfica forma parte de lo que llamo el Método Estratégico Coreográfico incluido en el Curso de Composición Coreográfica para Competencias.

En la parte 1 te anticipé que íbamos a desarrollar el CUÁNDO y es por eso que analizamos la estrategia anual, que no va directamente con la composición del movimiento (lo que corresponde a la creación) pero si tiene relación con este proceso. ¿Por qué? Porque si yo tengo el tiempo a mi favor, puedo administrarlo y tengo la posibilidad de crear tranquilamente.

Antes de seguir creando, quiero que frenes un segundo la imaginación y enciendas el modo estratega.

En cualquier coreografía hay cuatro fuerzas invisibles que afectan el resultado final:

  • lo que nos favorece
  • lo que nos limita
  • lo que podemos aprovechar
  • lo que nos puede complicar

Esto en gestión se conoce como análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) y aunque suene corporativo, es una herramienta perfecta para los grupos de danza porque si no identificás estas cuatro variables ANTES de empezar, te las vas a encontrar igual… pero tarde, en medio del proceso o, peor, en el escenario.

Debilidades en un grupo

Muchas veces no son técnicas sino de gestión del tiempo y toma de decisiones.

Ejemplo clásico: pasar media hora discutiendo un movimiento, una destreza o incluso el vestuario… y después ni siquiera usarlo en la coreografía final. Eso es una debilidad, porque afecta la productividad del ensayo. Pero ojo: una debilidad puede transformarse en oportunidad o incluso en fortaleza, dependiendo de cómo se gestione.

Amenazas frecuentes

  • No leer el reglamento: si no conozco los criterios del campeonato, puedo tener una excelente coreografía pero recibir un descuento por algo que podría haber evitado. Eso me puede dejar afuera de la siguiente ronda, del podio o del primer puesto.

Lesiones: por más que podamos tratarlas, afectan el tiempo del proceso. Si uno de los integrantes mas comprometidos no puede bailar, eso modifica la estrategia.

Fortalezas reales

Una fortaleza no es solo “bailan bien”. Una fortaleza es conocer qué sabe hacer cada integrante y tomar decisiones en base a eso. Si sé quién tiene mejor resistencia, quién tiene mejor manejo de piso, quién tiene mayor actitud o control, puedo coreografiar con estrategia.

Otra fortaleza clave: el entrenamiento físico. Muchos grupos empiezan con una ejecución y terminan otra porque se cansan. El entrenamiento no es solo salud: es consistencia escénica.

Oportunidades posibles

  • Experiencias previas en competencia: si 7 de los 30 integrantes ya estuvieron en otros escenarios, puedo considerarlos para entradas/salidas clave porque entienden dinámicas de público y espacio.
  • Tomar clases variadas con distintos profesores: aunque no sean de la misma academia, toda esa información corporal se traduce en versatilidad escénica. 

Tristemente una debilidad en varios lados sigue siendo la frase “mi profe no me deja tomar clases con otros docentes”.

📆 Ejemplo de planificación anual

  • Enero – Lectura de reglas y objetivos.
    Propongo no empezar por los movimientos ni por la música sino por entender a qué juego estoy jugando.
  • Febrero – Oficina.
    Ideas, selección musical, pretemporada física. Desde el día uno ya hay fuerza, resistencia y flexibilidad en proceso (aunque sea delegada).
  • Marzo – Edición musical.
    Con tiempo suficiente para probar cambios y ajustes sin apuro.
  • Abril – Creación de movimientos.
    Primer borrador coreográfico.
  • Mayo – Formaciones y adaptación de integrantes.
    Se fue alguien, entró alguien nuevo → se ajusta. Nada se derrumba.
  • Junio – Primera versión completa de la coreografía.
    No es definitiva, pero ya se puede mostrar.
  • Julio – Ensayos con público.
    Familiares, otros grupos, invitados al estudio para que la mirada externa sea parte del proceso.
  • Agosto – Inscripciones / administrativos.
    DNI, planillas, pagos. Todo tiene tiempo administrativo.
  • Septiembre – Primera presentación en escenario (aunque no sea la competencia principal).
    El grupo necesita practicar la coreografía antes de la fecha clave.
  • Octubre – Competencia objetivo.
  • Noviembre / Diciembre – Otros eventos, shows o descanso activo.
    Y luego se reinicia el ciclo.

🎯 Lo importante

Esto no trata de hacer “más cosas”, sino de ordenar lo que ya hacen, en una línea de tiempo que cuide:

  • La energía del grupo,
  • La salud física,
  • La claridad mental del coreógrafo.

EJEMPLO DE ENERO

En este ejemplo propongo algo muy simple: dividir una tarea grande en partes pequeñas para que sea realmente realizable.

La actividad principal del mes es leer el reglamento, pero en lugar de querer hacerlo todo de una vez (y nunca empezarlo), lo distribuyo a lo largo de las semanas.

Enero tiene 31 días. Lo tomo como un bloque estratégico y lo desarmo así:

Semana 1: busco el reglamento, lo descargo o lo imprimo. Nada más. Tenerlo a mano ya es el primer paso real.
Semana 2: le hago un vistazo general y leo algunas páginas para entender cómo está estructurado.
Semana 3: continúo leyendo un tramo más. Avanzo sin presión.
Semana 4: termino la lectura completa para ya tener claridad sobre lo que suma y lo que descuenta.
Semana 5: hago una relectura ligera, tomando notas o marcando dudas.

Con esta simple división, termina enero y ya sé exactamente a qué competencia voy a ir, cuáles son los criterios, cuáles son los ítems técnicos y artísticos que se evalúan y qué cosas debo evitar para no perder puntos.

Incluso puedo compartir el reglamento con mi grupo para que entiendan el propósito colectivo ya que es clave que quienes están en el escenario sepan que se tiene en cuenta al momento de que el panel puntúe la coreografía. Preguntas como “¿qué pasa si se me cae la gorra mientras bailo?” dejan de ser anécdota para convertirse en criterio: tal vez eso signifique un descuento.

El tiempo puede estar en nuestra contra o a nuestro favor. En este caso, usar Enero de forma inteligente hace que todo lo que viene después sea más claro y más liviano.

EJEMPLO DE LA SECUENCIA DE DECISIONES

Muchas veces las decisiones creativas se toman en desorden, y eso genera confusión o desgaste en el proceso. Para evitar eso, propongo pensar la creación coreográfica como una secuencia lógica de decisiones.

El orden puede variar según el grupo o el estilo, pero este ejemplo sirve para entender el concepto:

Primero defino quiénes son los integrantes. Con esa información, recién ahí elijo a qué campeonato quiero ir. En función de ese campeonato y del perfil del grupo, decido qué estilos voy a representar.

A partir de ahí puedo elegir la música, aunque a veces sucede al revés: encuentro una música que me mueve y desde ahí empiezo a bailar, improvisar y comprobar si realmente encaja con lo que quiero presentar.

Una vez que la música y el estilo están claros, selecciono la vestimenta. Después los movimientos, y finalmente armo las secuencias.

En este ejemplo no estoy hablando todavía de edición musical ni formaciones, porque lo importante es entender que todo parte de tener un plan.

Si mi objetivo es “que mi grupo esté en tal escenario en tal fecha”, entonces necesito al tiempo como aliado, no como enemigo. Incluso antes de hacer audiciones puedo tener este plan armado: ya sé a qué campeonato apunto, qué estilos/formas de arte quiero mostrar y qué perfiles de bailarines estoy buscando. Eso me permite elegir con intención, y no simplemente “ver quién aparece”.

Antes de pasar a lo siguiente te invito a que respondas la siguiente pregunta en los comentarios:

¿Cuál sería tu orden ideal de decisiones?
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Llegamos al final de la Parte 2 y quiero agradecerte por leer este contenido, te anticipo un poco de lo que va a incluir la Parte 3 con la siguiente imagen:

En la 3ra y última parte voy a mencionar distintos temas para que tengas en cuenta y vas a poder desarrollarlos adquiriendo mi Curso de Composición Coreográfica para Competencias en donde desarrollo el QUÉ HACER teniendo en cuenta un sistema de puntuación general y el desglose de cada ítem que se juzga en las competencias coreográficas.

Muchas gracias por tu tiempo, ¡a seguir creando!

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